Las personas aprendemos por imitación; lo hacemos los mayores y, sobre todo, lo hacen los niños. En poco tiempo, durante los primeros años de vida, aprendemos cosas tan básicas como andar o hablar. Sin embargo, aunque podríamos aprender a caminar o a nadar sin que nadie nos enseñara, jamás lograríamos hablar si antes no escucháramos a alguien hacerlo, si nadie nos escuchara a nosotros o si nadie reaccionara a lo que decimos. La escucha es la base del aprendizaje de una lengua, puesto que sin escucha no habría lengua.
Aprendemos a hablar por imitación, gracias a una exposición constante al lenguaje. Así, a base de escuchar a la gente que nos rodea y nos cuida, de repente un día nos lanzamos con sonidos que intentan tener algún sentido. No es un proceso consciente, sino que aprender a hablar es algo natural y espontáneo. Hay una explicación científica para ello, y es que en los primeros años de vida se activan en el cerebro un sinfín de mecanismos que favorecen la adquisición del lenguaje. Tenemos el cerebro más moldeable que nunca y eso, junto con la intuición, favorece que en edades tempranas podamos aprender no sola una, sino hasta una segunda o una tercera lengua.
Y si todo esto funciona con la lengua materna, ¿por qué no va a funcionar también con el inglés? Esta es la base de nuestro método Natural English. Las canciones, las películas, la lectura en voz alta… todo suma a la hora de llenar el día a día de ratos en inglés para que la exposición al idioma sea continua y el aprendizaje, natural. Para ponerlo bien fácil hemos recopilado algunos trucos para aprender inglés escuchando. Let’s go!
Igual que aprendemos nuestra lengua materna a fuerza de escucharla a nuestro alrededor, el listening es la herramienta que nos ayuda a aprender inglés de forma natural. Si nunca esperaríamos que un bebé aprendiera a escribir antes que a hablar, tampoco tenemos que esperar que nuestros hijos e hijas sepan escribir bien en inglés antes de empezar a entenderlo y hablarlo. De las cuatro skills (listening, speaking, reading, writing), la comprensión oral es tan importante porque ayuda a:
¿Y por dónde empezamos? La constancia es clave, pero no se trata de escuchar cualquier cosa en inglés a todas horas. Para ayudar a nuestros hijos e hijas a aprender inglés escuchando, debemos facilitarles contenidos adaptados a sus intereses y a su capacidad de comprensión. También debemos procurar que la exposición al inglés sea lo más real y variada posible, porque eso enriquecerá su aprendizaje. Y, sobre todo, cuanto más distendido sea el ambiente en el que se produzca la exposición y la interacción con la nueva lengua, más cómodos y seguros se van a sentir sus pequeños usuarios, derribando así las barreras que tanto acomplejan a los adultos, como la vergüenza y la inseguridad.
Aunque ya hemos adelantado algunas pistas, vamos a sintetizar los mejores trucos para aprender inglés escuchando.
1. Dedicad un rato al listening todos los días.
El objetivo es convertir el rato de escuchar inglés en un hábito y no en una obligación. Puede que nos cueste un poco al principio, pero si buscamos ese hueco durante la merienda o de camino al cole, enseguida nos acostumbraremos a dedicar unos minutos al día a la escucha del inglés con nuestros pequeños. Para ellos también se convertirá en algo habitual y en parte de su rutina diaria, de modo que escuchar canciones o ver dibujos y películas en inglés no se les hará tedioso, sino natural.
2. Quedaros con el significado global.
Uno de los enemigos del listening es querer entenderlo todo. Eso puede frustrarnos y aburrirnos, pero la solución es muy sencilla: quedaros con la idea general de lo que estáis escuchando. No importa si hay palabras que se os escapan, así que no os forcéis en buscarlo todo en el diccionario. No pasa nada. A menudo el contexto es suficiente, así que simplemente debéis dejarlo fluir. En el caso de dibujos animados, además, las imágenes complementan perfectamente los diálogos, de modo que ayudan a los más pequeños a entender la historia sin problemas de forma genérica. Además, repetir el listening todas las veces que queráis también es una buena idea; a lo mejor, cosas que no habéis entendido a la primera, llegáis a entenderlas a la segunda o a la tercera.
3. Mirad la televisión en versión original.
Más allá de sesiones de cine en inglés, en las que conscientemente nos proponemos dedicar un rato largo al listening, la televisión nos puede ayudar a escuchar en inglés durante ratos más cortos, y así evitamos aburrirnos, cansarnos y abandonar. Además, a menudo la tenemos encendida en casa sin hacerle mucho caso. Aprovechad para ponerla en versión original, de modo que tus hijos e hijas se acostumbren también a escuchar de lejos los dibujos animados en inglés. Incluir el inglés como algo natural en vuestro día a día es un recurso muy valioso para el aprendizaje del idioma. La televisión ofrece multitud de registros y acentos, de modo que el aprendizaje es muy rico y variado.
4. Utilizad las transcripciones.
Ver escrito aquello que estamos escuchando ayuda mucho a comprenderlo mejor. Eso es válido para los subtítulos de dibujos y películas, pero también para las letras de las canciones. Cuando una canción os enganche, no dudéis en buscar la letra para tratar de entender un poco mejor qué dice. Si los niños son pequeños para leerla, podéis ayudarlos a pronunciar mejor esas estrofas que a veces solo tararean.
Cuanto más constante, rica y variada sea la exposición al inglés, mejores serán los resultados. ¿Y qué podéis escuchar en familia para ayudar a los pequeños de casa con el idioma? Ya hemos hablado de la televisión, pero también hay más recursos interesantes.
Canciones en inglés
Es innegable que la música es una gran herramienta para el aprendizaje. Las canciones nos ayudan a escuchar inglés de una forma más divertida, con estribillos repetitivos y melodías pegadizas. Es interesante escuchar canciones infantiles en inglés, pero el universo musical es tan amplio que podéis escuchar todo lo que os apetezca. Lo podéis acompañar de baile y movimiento, y la experiencia será todavía más completa. Recordad que podéis escuchar una misma canción tantas veces como queráis para entender bien lo que dice y que, si alguna palabra se os resiste, encontraréis la respuesta en la letra.
Películas en versión original
Ver dibujos animados y películas en inglés transforma el aprendizaje automáticamente en algo divertido y entretenido. Debéis buscar historias adecuadas a los intereses y al nivel de vuestros hijos e hijas, y empezar poco a poco. Tal vez al principio os cueste ver una película entera en inglés, pero podéis empezar con capítulos de dibujos animados o con vídeos de YouTube, que son más cortos.
Actividades en inglés
Aprender inglés a partir de situaciones reales es muy estimulante. Las canciones y las películas son muy prácticas, pero el inglés en directo está vivo y favorece la interacción. Por eso, os animamos a buscar actividades en inglés en vuestras localidades. En Kids&Us organizamos talleres durante todo el año a los que os invitamos a venir para reforzar el aprendizaje; es posible que en la biblioteca también organicen horas del cuento en inglés o encontréis talleres de cocina en algún centro social. Todas las actividades son buenas para aprender nuevos registros y descubrir nuevos acentos.
Talking Pen
¿Te imaginas un cuento que se leyera solo en voz alta y en inglés? Eso es posible con el Talking Pen de Kids&Us, un lápiz digital que lee en voz alta todos los cuentos de Kids&Us. Va equipado con un escáner capaz de leer los cuentos compatibles, impresos con tecnología de sonido, y un altavoz que reproduce el sonido en voz alta. Esta y otras herramientas digitales en inglés, como juegos y aplicaciones en línea, son muy útiles para convertir el listening en una actividad de lo más entretenida.
Un último consejo: divertíos con el inglés. La diversión es la mejor aliada del aprendizaje. Buscad cosas para escuchar que os gusten y que enganchen a vuestros hijos e hijas; los dibujos animados o los vídeos de sus personajes favoritos les ayudarán a estar más y mejor predispuestos a escuchar y a entender.